Llegar a Murcia por trabajo, con la ilusión de estrenar tu primer contrato como funcionario o joven profesional, debería ser un momento de celebración. Pero nada más empezar a buscar habitación o piso, te das de bruces con un obstáculo enorme: la fianza del alquiler.
Ese dinero que, en teoría, sirve para cubrir desperfectos o impagos, en la práctica se ha convertido en una barrera de entrada brutal para quienes simplemente buscan un lugar donde vivir unos meses.
La realidad es dura: en Murcia (y en casi todas partes) es habitual que te pidan dos o incluso tres mensualidades de fianza. Y claro, si estás empezando en tu primer destino laboral, ¿de dónde sacas de golpe esa cantidad de dinero? Entre mudanza, gastos de instalación y sueldos que todavía no se han cobrado, la cuenta bancaria se queda temblando antes incluso de que pongas el primer pie en tu nueva habitación.
El problema de la fianza del alquiler para los jóvenes
La teoría es bonita: la fianza del alquiler está pensada como garantía. Pero en la práctica, muchos caseros la utilizan como un filtro para “asegurarse” de que solo entra quien puede pagar mucho desde el principio.
Imagina:
- Tu contrato laboral es de 3 semanas.
- El alquiler que encuentras en Murcia cuesta 400 € al mes.
- Te piden 1.200 o 1.600 € de fianza por adelantado.
Solo con eso, ya llevas gastados tres sueldos antes de haber vivido un solo día en tu nueva ciudad. Y lo peor es que, si por cualquier motivo tu contrato de trabajo no se renueva o te trasladan, recuperar ese dinero es una odisea.
Muchos jóvenes viven esta situación como un muro invisible que les impide acceder a un alquiler digno. La ilusión de un nuevo empleo se mezcla con la angustia de no saber si podrán afrontar la fianza sin pedir ayuda o endeudarse.
La devolución de la fianza del alquiler: una eterna incertidumbre
Si hay algo que genera ansiedad en cualquier joven que se muda, es la devolución de la fianza del alquiler. Porque, seamos sinceros, ¿quién no ha escuchado la típica frase de: “Ya te haremos la transferencia en unas semanas”? Y esas semanas se convierten en meses, y esos meses en llamadas que nunca se responden.
La realidad es que muchos jóvenes sienten que recuperar su fianza es casi una misión imposible. Aunque entregues las llaves con todo limpio y sin desperfectos, siempre aparece algún “detalle” que justifica que el casero se quede con parte del dinero. Y claro, para alguien que llega a Murcia solo por unos meses, esa pérdida puede suponer un auténtico golpe económico.
En Casa Decan lo vemos de otra forma. Si cumples con tu contrato y dejas la habitación como la encontraste, la devolución de la fianza del alquiler es rápida y transparente. Porque la confianza es mutua: tú cuidas del espacio, y nosotros cuidamos de que recuperes tu dinero sin historias raras.
Casa Decan: un modelo distinto
En Casa Decan creemos que la fianza no debería ser un muro ni una fuente de angustia. Por eso hemos apostado por un modelo diferente:
- Solo pedimos una mensualidad de fianza. Nada de dos o tres meses imposibles de asumir.
- Nos comprometemos con la devolución de la fianza del alquiler de forma justa y clara. Si dejas la habitación en buen estado y avisas con tiempo, recuperas tu dinero sin excusas.
- Adaptamos el contrato a tu realidad laboral: si tu trabajo es temporal, tu estancia también puede serlo.
Lo que queremos es que te instales sin sentir que has vaciado tus ahorros en un solo movimiento. Que tengas un hogar donde puedas centrarte en tu trabajo y tu vida en Murcia, no en si recuperarás o no tu dinero al final.
La fianza del alquiler: un reto añadido a la precariedad laboral
Si lo pensamos bien, pagar la fianza de un alquiler no es un gasto aislado: se suma a un contexto ya de por sí complicado para muchos jóvenes que empiezan su etapa profesional.
Por un lado, están los contratos laborales temporales, que generan una sensación constante de incertidumbre: hoy trabajas en Murcia, mañana puede que tengas que mudarte a otra ciudad. Esa falta de estabilidad hace que comprometerse a contratos largos y fianzas elevadas sea casi imposible.
A esto se añaden los sueldos ajustados. Muchos jóvenes entran en el mercado laboral con sueldos que apenas cubren lo básico: alquiler, comida, transporte… Si además hay que añadir dos o tres mensualidades de fianza de golpe, el presupuesto se rompe antes incluso de empezar.
Y no olvidemos el reto de mudarse a una ciudad nueva, con todo lo que implica: gastos de traslado, muebles, adaptarse a un entorno desconocido, empezar desde cero con amigos y rutinas. Todo esto ya es suficiente reto como para que encima el sistema de alquiler ponga más piedras en el camino. Al final, la fianza se convierte en una barrera que deja fuera a quienes más necesitan oportunidades de alojamiento digno y accesible.
En Casa Decan entendemos esta realidad. Por eso nuestro modelo de co-living nace para romper con esas barreras: pedimos solo un mes de fianza, ofrecemos contratos flexibles y te damos la tranquilidad de que tu dinero estará seguro. Una forma de vivir más justa, adaptada a los tiempos actuales y, sobre todo, pensada para ti.
La diferencia de pedir solo un mes de fianza
Puede parecer un detalle, pero no lo es. Pedir solo un mes de fianza cambia totalmente la experiencia de mudarse:
- No tienes que tirar de ahorros imposibles.
- No empiezas tu etapa laboral con números rojos en la cuenta.
- Te sientes más libre, porque sabes que recuperarás ese dinero sin dramas.
Al final, se trata de confianza. Nosotros confiamos en nuestros huéspedes, y ellos confían en que en Casa Decan tendrán un contrato claro, justo y sin trampas.
En lugar de poner barreras económicas desde el principio, preferimos que te centres en lo que de verdad importa: sentirte en casa.
Un hogar no se mide por la cantidad de fianza que pagas, sino por la tranquilidad de tener un espacio donde descansar, convivir con otros jóvenes y sentir que, aunque tu contrato laboral sea temporal, tu calidad de vida no tiene por qué serlo.
Casa Decan: una fianza del alquiler sin abusos, pensada para ti
La fianza del alquiler debería ser una garantía sencilla y justa, no un muro que te impida acceder a una vivienda. Sin embargo, para muchos jóvenes que llegan a Murcia con un contrato temporal, se ha convertido en un problema añadido que complica aún más el inicio de su etapa laboral.
En Casa Decan lo vemos diferente. Por eso:
- Solo pedimos una mensualidad de fianza del alquiler, sin cifras imposibles.
- Nos comprometemos a una devolución clara y justa, sin excusas ni rodeos.
- Apostamos por un modelo pensado para quienes buscan un hogar real y flexible, sin ataduras ni cargas económicas innecesarias.
Porque empezar tu primer trabajo ya supone bastante presión. Tu alquiler no debería ser otro obstáculo, sino una parte fácil del camino. Y ahí es donde nosotros marcamos la diferencia: haciéndote la vida más sencilla desde el primer día.
Si te ha gustado alguna de nuestras habitaciones y quieres consultar si está disponible, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Puedes escribirnos a través de nuestro formulario de contacto, o incluso por WhatsApp. ¡Estaremos encantados de ayudarte!
